Ya no usas la ropa que recuerdo.

 Me dolía verla con l a sudadera que te regalé un invierno, aquel en el que no se sentía el frío por el calor de tus brazos. Ahora, se siente el frío incluso en verano. 

Me dolió verte fotografiado con la camisa que compartíamos, la de cuadros, con ella a un lado.

Me dolió verte con la ropa que yo elegí para ti en otros lugares y personas que yo no conocía. Poco a poco avanzabas, solo que ahora lo hacías sin mí. 

Ha pasado mucho tiempo y todavía te pienso, aún conservo la bufanda que me obsequiaste, ese día te quise más que otras veces. Pero, regalé tu sudadera, raspaba en el alma al momento de utilizarla. 

Ya quiero dejar de quererte, ya no quiero escucharte en canciones ni pensarte en sueños, pues después de tanto, ya no eres esa persona. 

Hoy ya no conozco la ropa que usas, yo no elegí ese suéter, ni llegué a usar esa playera. Reconozco esa sonrisa, esa mirada y tus ojos soñadores, que ingenuamente aún creo que me pertenecen. 

Pero ya no recuerdo tu voz, espero pronto olvidar tus ojos y el amor que aún siento.  

Comentarios

Entradas populares